El 8 de octubre se conmemora el Día Internacional de la Dislexia, una jornada dedicada a visibilizar y sensibilizar sobre este trastorno del aprendizaje que afecta aproximadamente al 10% de la población mundial.
Cada 8 de octubre se conmemora el Día Internacional de la Dislexia, una fecha establecida para visibilizar este trastorno del aprendizaje que afecta aproximadamente al 10% de la población mundial. En Argentina, se estima que entre el 3% y el 6% de los niños en edad escolar presentan dislexia, una dificultad específica del aprendizaje que impacta en la lectura, escritura y, en algunos casos, en el cálculo matemático. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce la dislexia como una alteración neurobiológica que no está relacionada con la inteligencia, sino con la forma en que el cerebro procesa la información escrita.
¿Cómo detectar la dislexia?
La detección temprana de la dislexia es fundamental para un abordaje adecuado. Entre los signos a tener en cuenta se encuentran: dificultad para aprender a leer y escribir, inversión o confusión de letras y palabras, lentitud en la lectura, omisión o repetición de palabras, y problemas para recordar secuencias de letras o números. Es importante destacar que estos síntomas no se deben a una falta de inteligencia o esfuerzo, sino a una forma diferente de procesar la información escrita. En Catamarca, el Ministerio de Educación ha implementado jornadas de capacitación para docentes, como la realizada en Tinogasta, con el objetivo de sensibilizar y formar al personal educativo en el reconocimiento y abordaje de la dislexia y otras dificultades específicas del aprendizaje (DEA)
¿Cómo acompañar a una persona con dislexia?
El apoyo a personas con dislexia debe ser integral y personalizado. Es esencial fomentar un entorno de comprensión y paciencia, evitando la sobrecarga de tareas y brindando tiempo adicional para la lectura y escritura. Las adaptaciones curriculares, como la utilización de material audiovisual, la lectura en voz alta y el uso de tecnologías de apoyo, son herramientas efectivas. Además, es recomendable la intervención de profesionales especializados, como psicopedagogos y terapeutas ocupacionales, que puedan diseñar estrategias específicas para cada caso.
Herramientas digitales para facilitar el aprendizaje
En la era digital, existen aplicaciones diseñadas para facilitar la lectura y escritura de personas con dislexia. Una de ellas es LectO, una aplicación gratuita desarrollada por estudiantes argentinos que permite escuchar el texto, visualizar palabras en pictogramas y realizar ajustes en el formato para mejorar la comprensión. Otra herramienta útil es Relexia, que ofrece ejercicios personalizados para mejorar la decodificación, fluidez y comprensión lectora. Además, Atenxia es una plataforma que proporciona intervenciones terapéuticas para tratar trastornos como la dislexia y el TDAH, adaptadas tanto para padres como para profesionales





